Con respecto a la alimentación de la futura madre surgen muchas dudas, algunas piensan que tienen que “comer por dos”; mientras que la mayoría no tiene claro cuánto es lo que tiene que comer para mantenerse saludables tanto ellas como el bebé.

Según los doctores, las gestantes que no se alimentan bien y no consumen vitaminas ni hierro, ponen en riesgo la salud física de sus futuros hijos; por ejemplo los bebés pueden desarrollar enfermedades asociadas con la restricción del crecimiento intrauterino y en los casos más graves llegar hasta la muerte.

En el caso de las madres vegetarianas, al no consumir pescado, pollo o carne, no aportan a sus bebés una buena alimentación rica en proteínas y estos se exponen a sufrir trastornos en su desarrollo.

Igualmente, las mujeres que viven obsesionadas con su figura no se alimentan bien; ellas pueden desarrollar anemia, lo que implica un alto riesgo de hemorragia en el parto y además el niño puede nacer prematuro y desnutrido.

Por esto, los especialistas recomiendan que una mujer embarazada debe comer de una manera equilibrada, es decir consumir alimentos de todos los grupos, cuidando lógicamente subir mucho de peso.

Diariamente deben consumir entre 2000 y 2500 calorías, dando preferencia a las comidas que contengan Omega 3, vitaminas, ácidos grasos y proteínas. También es muy importante que tomen abundante agua (dos litros diarios).

Lo normal es que una mujer suba entre diez y doce kilos con el embarazo, se debe evitar comer muchas harinas como el pan y por ningún motivo “comer por dos”, ya que los extremos son perjudiciales para la madre y el bebé.