El monitoreo de glucosa debe ser continuo como parte de la atención prenatal para las mujeres con diabetes, así se mejora el control de la glucosa en sangre y disminuye el riesgo de exceso de peso en el bebé (macrosomía), según un estudio publicado en el British Medical Journal.

Es muy importante que la mujer con diabetes mantenga sus niveles de glucosa en sangre bajo control durante el embarazo, ya que puede haber un aumento en la cantidad de glucosa y hace que el bebé crezca más rápido de lo normal, y puede tener dificultades en el momento del nacimiento, así como un aumento a largo plazo del riesgo a la obesidad y la diabetes tipo 2.

Se ha comprobado que la medición de glucosa con más frecuencia mejora los resultados, pero la frecuencia óptima de estas pruebas en la sangre no se conoce.

El Dr Helen Murphy y sus colegas fueron los encargados de examinar el monitoreo continuo de glucosa durante el embarazo, llegando a la conclusión que se puede mejorar el control de la glucosa materna y reducir el riesgo de macrosomía en los bebés. El monitoreo continuo de glucosa se utilizó como una herramienta de ayuda para educar a la paciente, optimizar su estilo de vida y el manejo terapéutico de los niveles de glucosa en sangre.

Los bebés de madres a las que se les hacen el seguimiento continuo tienen menor peso al nacer y reducción del riesgo de macrosomía.

"Este ensayo proporciona pruebas de beneficios duraderos de la supervisión continua para los bebés de madres con diabetes y es muy importante tomarlo como estrategia para la salud pública, que tienen por objeto reducir la carga de la obesidad en la infancia", dicen los autores.