Dejar a los niños con una persona de nuestra confianza es lo mejor cuando tenemos que dejar a nuestros niños, pero muchas veces los padres dejamos a los niños con sus abuelos y de pronto estos se convierten en niñeras gratuitas empezando a desarrollarse una situación que puede llegar a ser incómoda.

El cariño de los abuelos es especial y único, pero conviene valorarlo y permitir que los niños pasen tiempo valioso con ellos sin que esto signifique que los abuelos tengan que cuidarlos y hacer labores que ya no son propias para su edad.

Algunos padres no están en condiciones de contratar a una niñera, y dejan a sus hijos con los abuelos, sin recordar que ellos ya dieron su vida entera dedicada a sus hijos y necesitan de su tiempo para disfrutar la vida.

Es verdad que es mejor dejar a los niños con un familiar, antes que con manos extrañas y la presencia de los abuelos ofrece mucha tranquilidad a los padres, cuando se quedan al cuidado de sus hijos, pero lo ideal sería que dejen una niñera junto a los abuelos para hacer las labores más pesadas.

Sin embargo se debe tener mucha comunicación con los hijos y con los abuelos, con la finalidad de evitar que se desarrolle una rivalidad entre padres y abuelos por el cariño de los niños.

Existen abuelos que se ligan mucho a sus nietos, los adoran y desean tenerlos a su cuidado, pues sienten con ellos una maravillosa razón para vivir, sin embargo otros abuelos prefieren dedicar su tiempo a actividades sociales y recreativas propias de la tercera edad.

Hoy existen programas donde se desarrollan terapias, gimnasia y reuniones para promover un envejecimiento digno y saludable, muchos abuelos prefieren participar y sentir que aún son parte de esta sociedad.

Debemos entenderlos y permitirles que vivan su etapa con intensidad y que puedan dedicar tiempo a los nietos sin que esto signifique sentirse esclavizados con el cuidado de los niños.